176207

L E C T U R A 19 19 Resume este texto en no más de tres líneas. Formula luego su tema y di con cuál de los tres grandes grupos de artículos de Larra lo relacionarías. Analiza la estructura del texto y divídelo en partes atendiendo a su contenido. 20 En este fragmento se combinan la narración, la exposición y la argumentación. Identifica los pasajes de cada tipo y explica cómo se relacionan entre sí las tres modalidades del discurso. 21 ¿Qué opinión manifiesta el autor? ¿Qué tipo de argumentos da para sostener esa opinión (emocionales, racionales…)? Explica el sentido de la frase «La sociedad […] estará ya satisfecha: ya ha muerto un hombre». CRÍTICA Y CREACIÓN LITERARIA 22 Escribe ahora un artículo de opinión en el que expongas tu parecer sobre este texto de Larra. A C T I V I D A D E S El condenado a muerte Un pu eblo ent ero obstr uye ya l as cal l e s del tránsito. Las ventanas y balcones están coronados de espectadores sin fin , que se pisan , se apiñan y se agrupan para devorar con la vista el último dolor del hombre. –¿Qué espera esta multitud? –diría un extranjero que d e sc ono c i e se l a s c o stumbre s– . ¿E s un re y e l qu e va a pasar, ese ser coronado que es todo un espectáculo para un pueblo? ¿Es un día solemne? ¿Es una pública festividad? ¿Qué hacen ociosos esos artesanos? ¿Qué curiosea esta nación? Nada de eso. Ese pueblo de hombres va a ver morir a un hombre. –¿Dónde va? –¿Quién es? –¡Pobrecillo! –Merecido lo tiene. –¡Ay! Si va muerto ya . –¿Va sereno? –¡Qué entero va! He aquí las preguntas y expresiones que se oyen resonar en derredor. Numerosos piquet es de infant erí a y caballería esperan en torno al patíbulo. He notado que en semejante acto siempre hay alguna corrida1; el terror que la situación del momento imprime en los ánimos causa la mitad del desorden , la otra mitad es obra de la tropa que va a poner orden . ¡Siempre bayonetas en todas par t es ! ¿Cuándo veremos una so ci edad sin b ay on e t a s ? ¡ No s e pu e d e v iv i r s i n i n st r um e n t o s d e muerte! Esto no hace por cierto el elogio de la sociedad ni del hombre. […] Un tablado se levanta en un lado de la plazuela ; la tab l a z ó n d e snu d a ma n i f i e st a qu e e l re o n o e s n o b l e . ¿Qué quiere decir un reo noble? ¿Qué quiere decir gar ro t e v i l ? Q u i e re d e c i r i ndud ab l em ent e qu e n o h ay idea positiva ni sublime que el hombre no impregne de ridiculeces. Mientras estas ref lexiones han vagado por mi imaginación , el reo ha l legado al patíbulo […]. Las cabezas de todos, vueltas al lugar de la escena , me pusieron delant e qu e habí a l l egado el momento de l a cat ástrofe ; el qu e so lo habí a robado acaso a l a so ci edad , i ba a ser mu e r to p or e l l a ; l a s o c i ed ad t ambi én d a c i ento p or uno; si habí a hecho mal matando a otro, l a soci edad iba a hacer bien matándole a él . Un mal se iba a remediar con dos. El reo se sentó por fin . ¡Horrible asiento! Miré el reloj: las doce y diez minutos; el hombre vivía aún… De allí a un momento una lúgubre campana de San Millán , semejante al estruendo de las puertas de la e t e r n i d a d qu e s e a b r í a n , re s o n ó p o r l a p l a zu e l a ; e l hombre no existía ya ; todavía no eran las doce y once minutos. «La sociedad –exclamé– estará ya satisfecha : ya ha muerto un hombre». Mariano José de Larra 1 corrida : tumulto, desorden . Grabado de Goya. 3 itinerario 341

RkJQdWJsaXNoZXIy