Historias para leer Cuando tenía 24 años, se ordenó sacerdote. En aquel tiempo, hubo un periodo de hambre y escasez, y Domingo vendió todas sus posesiones, incluso los libros que tanto amaba, para ayudar a los pobres. Santo Domingo de Guzmán En el año 1216, Domingo consiguió la aprobación del papa Honorio III para fundar la Orden de Predicadores, conocida como Orden Dominicana o de los Dominicos. Siempre fue consciente de que para predicar, además de mostrar una actitud de humildad, era imprescindible tener un conocimiento profundo de las Escrituras. Por eso, envió a sus frailes a formarse en las universidades más prestigiosas de su tiempo. Domingo nació en Caleruega, Burgos, en 1170. Pertenecía a una familia muy creyente que descendía de los condes fundadores de Castilla. Durante siete años vivió con su tío, el arcipreste don Gonzalo de Aza. Con 14 años se fue a Palencia para estudiar Artes y Teología. La lectura de la Palabra de Dios le fascinaba tanto que pasaba noches enteras sin dormir. En un viaje por el sur de Francia se dio cuenta de que muchos de los que predicaban la Palabra de Dios no llevaban una vida de pobreza: se desplazaban en carruajes, vestían con ropas caras… Domingo no estaba en absoluto de acuerdo con esta forma de predicar. Él estaba convencido de que había que hacerlo desde la humildad y la pobreza. No quiero estudiar sobre pieles muertas y que la gente muera de hambre. Deseo fundar una orden religiosa. 90
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