El comienzo de una nueva vida La mañana trajo un rebrote de esperanza y buen humor. Tenía que ponerme en marcha t emprano, ya que el vehículo que iba a l levarme (una calesa al - qui l ada por el señor Smith , el comerci ant e en paños, t é y comesti bl es del pu eblo) debí a e st ar de regre s o aqu el mi smo dí a . Me l e vant é , me l av é , me vestí , tomé un rápido desayuno, recibí los cariñosos abrazos de mi padre, mi madre y mi hermana , besé al gatito, para gran escándalo de Sal ly, la criada , a l a qu e e stre ch é l a mano, me mont é en l a cal e sa , l e vant é el v elo qu e me cubría la cara y entonces, y solo entonces, estallé en lágrimas. La calesa se puso en marcha . Miré hacia atrás: mi querida madre y mi her - mana estaban en pie junto a la puerta , siguiéndome con la mirada y dándome su adiós con las manos. Les devolví el saludo y rogué a Dios por ellas con todo mi corazón . Al descender la colina , las perdí de vista . Cr uzamo s el val l e y c omenzamo s a ascender l a c o lina qu e e st aba al otro l ado . Mi entras subí amo s c on di f i cult ad , v o lv í a mi rar atrás : al l í e st aba l a torre del pueblo y, tras ella , la antigua y gris rectoría1, iluminada por un rayo de sol sesgado: no era sino un tenue rayo, pero el pueblo y las colinas colindantes permanecían en sombra , e interpreté esa luz errante como un buen augurio para los míos. Con las manos juntas imploré fer vientemente la bendición para sus habitantes y, al ver que la luz desaparecía , volví rápidament e l a cab eza , sin atre v erme a mi rar d e nu e v o , no fu era qu e lo enc ontrase envuelto en siniestras sombras, como el resto del pai saje. Anne Brontë , Agnes Grey (adaptación) Agnes Grey. Volando sola En muchas novelas de aprendizaje (nombre con el que se conoce las narraciones en las que el personaje principal va creciendo y enfrentándose a las dificultades de su entorno), uno de los momentos clave es el día en que el protagonista abandona el hogar en el que ser crio para llevar una existencia autónoma, sin depender de nadie. En Agnes Grey, una novela de la escritora inglesa Anne Brontë (1820-1849), la protagonista vive con su familia en una pequeña aldea en la que su padre ejerce como párroco. El señor Grey pierde sus ahorros y a partir de ese momento han de vivir en la pobreza. Para evitar gastos a sus padres y también para hacer realidad su vocación de ser maestra, Agnes decide marcharse de la aldea y trabajar como institutriz. La joven está ilusionada ante la etapa vital que comienza, pero no puede evitar sentirse embargada por la tristeza el día de la despedida. A P R E N D I Z A J E S Texto 1 1 rectoría: vivienda del parroco. 34
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