30 DIVERSIFICACIÓN I. ÁMBITO LINGÜÍSTICO Y SOCIAL. Material cortesía de . Prohibida su redistribución física y/o comunicación a través de internet o redes sociales. LECTURA 9 Nombre: Curso: Fecha: 14 COMPRENSIÓN LECTORA NUESTRA RELACIÓN CON LA NATURALEZA Durante miles y miles de años estábamos solo nosotros y la naturaleza. Y, de hecho, no existía una verdadera separación entre nosotros por un lado y las plantas, los animales o los ríos por el otro. Estábamos muy próximos porque dependíamos del medio natural en su estado salvaje para sobrevivir: necesitábamos las frutas y las bayas que crecían en los árboles; los peces de los ríos y de los mares; los animales que nos esforzábamos por cazar. La naturaleza era misteriosa. Apenas comenzábamos a adivinar sus ritmos, por eso todo sucedía como por arte de magia (si todavía hoy quedan tantos misterios sin resolver, imagínate entonces...). La naturaleza también era poderosa. Nada podía detener la fuerza de un río enfurecido, no había manera de predecir una tormenta, ni existían inventos capaces de hacer que las cosechas fueran más abundantes. La naturaleza era amiga, pero también enemiga: ¡imagínate lo que debía de ser vivir rodeado de animales que te querían comer! O tener que soportar sequías, inundaciones o plagas que podían destruir las plantas que debían servirte de alimento. Por eso, al principio de todo, rezábamos a las montañas, a los árboles y a los ríos. Con el paso del tiempo nuestra relación con el mundo natural fue cambiando. Como dejamos de tener tanto miedo, ya no sentíamos la misma necesidad de comunicar, pedir o agradecer; como la naturaleza ya estaba más o menos controlada, podíamos usarla a nuestro favor, sin preocuparnos tanto de las consecuencias. Pero después de un montón de errores, nos hemos dado cuenta de que el planeta tiene una capacidad de renovación finita (lo contrario de infinita) y de que todos estamos interconectados. Si destruimos los bosques rápidamente, estos acabarán desapareciendo; si destruimos el hábitat de un animal en particular, este correrá el riesgo de extinguirse; si una especie desaparece, otras desaparecerán después. Todo funciona en círculo, un círculo del que formamos parte. Aunque nos guste pensar lo contrario, todavía dependemos del planeta y de sus recursos. Y en este momento, la naturaleza también depende de nosotros. Nos hemos vuelto tan poderosos que somos capaces de destruir un planeta entero. Esto podría ser terrible, no hace falta explicar por qué. A pesar de todo, pensamos que el hombre es sensato –esto incluso ha sido probado por la ciencia–, de manera que no hemos hecho este libro impulsados por el miedo a que el planeta vaya a desaparecer, sino por la creencia de que cuanto más sepamos y más informados estemos, más fácil nos resultará apreciar y conservar la belleza y la riqueza del mundo natural. Además, sabemos por experiencia que el contacto con la naturaleza es positivo. Salir fuera es relajante y divertido, nos ayuda a ser más ágiles y creativos, a estar más atentos y seguros. Hay días en que nos sentimos sin energía; otros, más inquietos y bulliciosos. En ambos casos, tomar el aire y acercarnos a la naturaleza puede ser todo lo que necesitemos para sentirnos mejor. Ahí fuera, Maria Ana Peixe Dias, 2022 (adaptación) CONCEPTOS 1 Subraya en el texto las palabras que no entiendas y búscalas en el diccionario. 2 Copia todos los adjetivos del texto que hagan referencia a la naturaleza y que sirvan para describirla. MUESTRA
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