9 GEOGRAFÍA E HISTORIA 1.° ESO Material cortesía de . Prohibida su redistribución física y/o comunicación a través de internet o redes sociales. COMPETENCIA LECTORA LECTURAS DE GEOGRAFÍA Vientos Los monzones Las lluvias monzónicas que tienen lugar durante los meses del verano boreal sobre el espacio sudasiático proveen de agua a la mitad de la población del mundo. No obstante, en ocasiones la torrencial idad de las precipitaciones asociadas al monzón de verano provoca crecidas y desbordamientos de los cursos fluviales en los países afectados por esta circulación atmosférica regional. Todos los años, entre mayo y octubre, la estación de lluvias del monzón proporciona las lluvias que riegan los campos de arroz, permitiendo varias cosechas de este cultivo, base de la alimentación en los países del sudeste asiát i c o . P e r o l a r e g u l a r i d a d d e l a s l l u v i a s m o n z ó n i c a s d e v e r a n o d e v i e n e torrencialidad, ocasionando la precipitación de enormes cantidades de lluvia en pocas horas (recordemos que Cherepunji, en la India, ostenta el récord mundial de precipitación en un mes, 9.300 mm). De esta forma, los ríos experimentan súbitas crecidas de caudal, desbordándose y ocasionando inundaciones en ciudades y campos. Debemos recordar que el sur y sureste asiático es la región mundial con mayores efectivos y densidades de población, aspecto que explica la alta siniestralidad de estos episodios de avenida fluvial. Los estados de Uttar Pradesh, Bihar y Rajasthan en la India (Ganges); Bangladesh, la cuenca de los ríos Yangtsé, Liaohe, Liu Jang, Hongshui Hulane en China; la costa suroriental de Tailandia, la isla de Sri Lanka o la cuenca de los ríos Ravi y Sutlej en Pakistán son los territorios más frecuentemente afectados por lluvias intensas asociadas al monzón de verano. Jorge OLCINA CANTOS, Riesgos climáticos en la península ibérica, 1994. Adaptado Viento del norte en el Ampurdán He pasado estos últimos días recogido junto al lar, oyendo el silbido y el bramido del viento, intermitente, que aquí se llama «tramontana». En los alrededores del equinoccio de primavera, en el Ampurdán todavía el clima es de invierno. Esta «tramontana» del equinoccio suele ir unida a lo que los campesinos del Maresme l laman el temporal de las habas. Si el viento sacude fuerte, siempre hace daño; sus estropicios son considerables. Árboles astillados, surcos devastados, desorden general. Los guisantes suaves, las orejitas de las habas tiernas, la inflada coliflor, la escarola fina y blanca y la lechuga han quedado destrozadas. Comprobar que un remolino invisible ha destruido un almendro es un triste espectáculo. Ahora se puede saber, gracias a los aparatos, a qué velocidad marchaba el viento que causó tantos daños; es un consuelo, pero muy pequeño. En términos generales, la «tramontana» es un viento que nos llega de la otra parte de las montañas. Pasa, enloquecido, por el jardín admirable de las tierras del Rosellón; entra en el Ampurdán después de burilar las cimas heladas del Pirineo. Ya cerrada la noche, se ve blanca, ligeramente azulada, la estrella polar. Se ha de añadir que se trata de un viento seco en extremo, muy fino, de gran empuje, de soplo seguido, de buena respiración… Lo primero que este viento hace es limpiar, barrer las nubes del cielo. Es un viento que quiere cielos limpios y claros; se produce, entonces, una atmósfeMonzón en India. 6 Lecturas 50
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